El Consejo de la Polinesia Francesa ha instado al gobierno francés a asegurar los recursos en el lecho marino frente a los territorios de ultramar de cualquier empresa o nación que pretenda aprovecharse de ellos.
El 7 de septiembre, 43 de los 45 miembros del Consejo de Economía, Social, Desarrollo y Cultura de la Polinesia Francesa votaron a favor de la propuesta de establecer una prohibición temporal de la minería en los fondos marinos del archipiélago. Es una propuesta histórica, hecha por un país que se nutre del turismo y de los pocos recursos existentes, provenientes del fondo del mar.
El Consejo, que no tiene poder de decisión, pero actúa como consultor local del gobierno francés, es sin embargo una institución muy importante, que París debe tener en cuenta. El ministro de Recursos Marinos, Heremoana Maamaatuaiahutapu, dijo que esto debería ser un ejemplo para otros vecinos del Pacífico. “Kiribati, Nauru y las Islas Cook ya están inmersos en un proceso de exploración. Necesitamos que nuestros primos del Pacífico detengan esta locura. Somos el primer país miembro del Foro en adoptar esta resolución sobre la exploración de los fondos marinos. De momento, el conocimiento que tenemos de nuestro fondo marino es solo del 5 por ciento”. El ministro subrayó que la investigación científica y la exploración con el fin de explotar los recursos son dos cosas muy distintas.
La Zona Económica Exclusiva (ZEE) de la Polinesia Francesa tiene más de 4,7 millones de kilómetros cuadrados y representa casi la mitad de la superficie del agua bajo jurisdicción francesa. Por lo tanto, el Consejo instó al gobierno francés a asegurar los recursos en el lecho marino frente a los territorios de ultramar de cualquier empresa o nación que pretenda aprovecharse de ellos.
El pasado mayo, Maamaatuaiahutapu recordó que Wallis y Futuna, Nueva Caledonia y la Polinesia Francesa tienen la misma posición sobre la minería en aguas profundas. “Si tenemos que examinar lo que hay en el fondo del océano -subrayó el ministro- debe hacerse exclusivamente para la adquisición de conocimientos, no con fines de explotación. Y esto debe quedar muy claro. Queremos misiones de adquirir conocimientos. Ni siquiera me atrevo a decir ‘exploración’ porque ese término se asocia demasiado a menudo con la explotación. Tenemos 502 montes submarinos en la lista y no conocemos ninguno. Creo que es importante conocer la biodiversidad alrededor de estos montes submarinos, más allá de los minerales que albergan”.